El crecimiento acelerado de las ciudades intermedias en Colombia se ha elevado en los últimos 20 años de manera desmedida, causando un fuerte deterioro en la dinámica y estructura de la ciudad, ese apresurado crecimiento no ha permitido una buena planificación, y los planes de desarrollo que se han implementado no han logrado dar soluciones pertinentes como en el caso de Manizales que siendo ciudad capital del departamento de Caldas y más conocida como la capital cafetera de Colombia, cuenta con una población de 397.488 habitantes y es una ciudad con un alto potencial económico y social.